En este momento estás viendo La sobremesa: ritual de lo habitual y espacio de comensalidad

La sobremesa: ritual de lo habitual y espacio de comensalidad

Desde pequeño recuerdo cómo en mi casa, después de la fruta, todos continuábamos sentados a la mesa. La comida había terminado, pero la conversación continuaba, algunas veces acompañada de un café, algún dulce o incluso, ya siendo bastante mayor, de un chupito “para bajar la barriga”. Ese momento, que muchas de nosotras conocemos, puede ser mucho más que un simple hábito: desempeña un papel importante en nuestra vida familiar y social.

La sobremesa es un espacio de comensalidad, un lugar donde se cuentan historias, se comparten recuerdos y se fortalecen los lazos con familiares y amigas. ¿Cuánto hemos aprendido de las historias de nuestras mayores después de un almuerzo juntas? ¿Cuántas veces no hemos tejido nuestras redes familiares a partir de las historias de “Pepa la de Carmela”? Por no hablar de todas esas ocasiones —¡y no son pocas!— en las que seguimos evocando recuerdos escolares con nuestras amigas…

Desde la antropología, y sin ser estrictos, podríamos considerar la sobremesa un ritual cotidiano, un “ritual de lo habitual” —sí, como el icónico disco de Jane’s Addiction. Aunque no separa lo sagrado de lo profano ni presenta símbolos explícitos, es posible observar la sobremesa como un conjunto de actos repetitivos con reglas implícitas, que refuerzan la cohesión social.

La sobremesa nos recuerda que la cultura también se construye en lo cotidiano, en lo que parece trivial. Esos momentos que pasan desapercibidos sostienen nuestras relaciones sociales.

La próxima vez que te quedes hablando después de comer, dándole vueltas a una taza de café vacía, recuerda: no solo es una conversación. Estás siendo protagonista de un acto social, muchas veces ignorado e invisible, que recrea constantemente hilos de identidad, memoria y afecto. Un “ritual de lo habitual” que mantiene vivos los vínculos con tu familia, amigas o cualquiera con quien compartas la sobremesa.

Deja una respuesta